Diversos médicos particulares y especialistas en fisioterapia y neurología comenzaron a buscarme para promover mi recuperación, por ello mi familia y yo decidimos invertir en medicina privada para iniciar el proceso de rehabilitación dándome fisioterapia y estímulos eléctricos a los músculos. Los siguientes meses para mi fueron indescriptibles, estaba desecho emocionalmente; pase todo el primer año en el hospital totalmente paralizado y no se veía gran avance.

 

Después de un año y medio de tediosas terapias comencé a caminar, a mover mi brazo y mano izquierda, pero todavía no tenía sensación alguna en mi cuerpo ni movimiento en mi brazo derecho. Me enviaron a casa y debía seguir en terapias, pero no era yo, comencé a beber para llenar el vacío y desesperación, estaba deprimido, enojado conmigo y con la vida, me sentía derrotado y frustrado.

 

"No fue sino hasta el segundo año cuando mi mejor amigo Stuart se acerco para hablar conmigo y me dijo que no me reconocía, que no podía seguir a mi lado viendo como me destruía y que ese no era el James que conocía"...

 

Escucharlo realmente me afecto, cuando se fue, me mire por largas horas frente al espejo, me di cuenta que había cambiado y lo peor es que había renunciado a todo, incluso a mi sueño. Estuve toda la noche despierto pensando en lo que me había dicho Stuart y tratando de recordar lo que realmente era. Trataba de recordad mi vida, mi familia, el boxeo, las largas horas de dedicación y entrenamiento. Así que decidí a empezar a investigar y leer más sobre mi caso y cómo aplicaban estimulación a mis músculos (fisioterapia), como era que gradualmente activaban mi músculos y ayudaban a su desarrollo. Regrese a los libros, mi formación, todo lo que había aprendido aquellos años que había viajado representando a mi país aunado a mis estudios en la ciencia del deporte, coaching y como trabajaba la biomecánica de los músculos en el deporte y comencé a incorporarla lentamente a mi rehabilitación ligeros entrenamientos para ayudarme. Poco a poco comenzó a mejorar mi circulación y antes de que me diera cuenta comencé a ser lo que era tiempo atrás.

 

Me di cuenta que no podía vencerme...algo en mi espíritu y mi mentalidad deportiva, competitiva y guerrera no estaba dispuesta a escuchar y aceptar que nunca mas iba a salir de esa cama, como de niño no acepte me dijeran que los deportes no eran para mi. En Agosto del 2008 me dieron oficialmente de alta como una persona que podía llevar una vida normal; había recuperado movilidad completa de mi cuerpo y condición física.

 

Así que luego de este capitulo de mi vida, regrese a mis estudios para prepararme mas y poder compartir mis conocimientos y experiencia de cómo el deporte me ayudó a disciplinarme, a luchar por mis sueños y tras haber sufrido el accidente, a salir adelante.

 

A tan solo mis 28 años de edad me siento orgulloso de haber logrado tanto en mi carrera como deportista de alto rendimiento, haber tenido la oportunidad de iniciarme como entrenador a los 21 años, de haber trabajado para diversos Clubs y Centros de Entrenamiento y para el Gobierno en Escocia y México en la parte de acondicionamiento físico para atletas de alto rendimiento de las diferentes disciplinas así como en platicas motivacionales y de salud a comunidades.

 

Pero sobre todo de haber tenido la oportunidad de haber creado mi propia empresa de entrenamiento personal en Agosto del 2009, empresa de origen orgullosamente escoses que se crea con el propósito principal de crear una cultura física del deporte y de formar personas física y mentalmente más activas y saludables a través de Sistemas de Entrenamiento Funcional No Convencional con técnicas escocesas, preparación mental, ejercicios de rehabilitación y asesoría nutricional en el proceso al cambio hacia un MEJOR ESTILO DE VIDA.